Artículo 7: 3 años, 36 meses, 157 números
El 7 de junio de 2011 hemos cumplido 3 años de circular cada semana: 157 en total.
Ha sido todo completamente diferente a como lo podríamos haber visualizado al lanzarnos. Entre nosotros había —y hay hoy, aún— la convicción de que si dices algo con claridad, transparencia y sustento, el lector comprenderá y modificará su visión de los hechos.
Estábamos convencidos —aún lo estamos hoy— de que lo que haríamos serviría un doble propósito de servicio: 1) información clara, transparente y con sustento —para ayudar al lector a que en sus obligaciones de ciudadano actúe en consonancia con lo que más nos convenga como sociedad— y, 2) divulgación publicitaria de ofertas empresariales.
Lo primero —la información de calidad— la hemos podido generar: allá tú, lector(a) eres nuestro termómetro. Nuestro volumen de impresión depende de lo segundo y el éxito de quienes usan nuestro impreso como vehículo para la divulgación de sus productos o servicios depende de la capacidad de nuestra impresión y distribución. Es un asunto "circular".
La tecnología ha facilitado felizmente la producción de la información y la generación del papel impreso. Pero ese aumento de tecnología ha venido acompañado de un aumento de la población y de las viviendas a las cuales deberíamos llegar con un ejemplar. Antaño, la cuestión era "al revés": la producción del ejemplar en todos sus aspectos era obra de grandes amantes del periodismo; la impresión tenía sus dificultades, finalmente salvables y, lo más feliz, ¡el número de viviendas al cual había que llegar era mucho más pequeño!
Se acabaron esos tiempos en que un impreso podría llegar a todas las casas de Mérida, produciendo, así, cierto grado homogéneo de nivel informativo. Hoy el mundo es asunto de miles de millones. ¿Internet? Cierto: disponible cada día para más personas pero, ¿existe algún control de calidad colectivo con respecto a lo que en la red se ofrece?
Sabemos que hoy 60% o más (?) de las casas de Mérida cuentan con la posibilidad de conectarse a Internet. Una vez conectados, los usuarios verán lo que ellos deseen en ese momento. Lo más que podemos hacer es invitarlos, a todos, a hacer la página a7.com.mx su punto de partida para conocer detalles que podrían hacer la diferencia en tu percepción regional. Si tienes un teléfono inteligente, visita nuestra página: te va a gustar. También te ofrecemos alimentación vía RSS.
¡Gracias por tu compañía durante estos 3 años! Te esperamos para las décadas que queremos serte útil.
Ha sido todo completamente diferente a como lo podríamos haber visualizado al lanzarnos. Entre nosotros había —y hay hoy, aún— la convicción de que si dices algo con claridad, transparencia y sustento, el lector comprenderá y modificará su visión de los hechos.
Estábamos convencidos —aún lo estamos hoy— de que lo que haríamos serviría un doble propósito de servicio: 1) información clara, transparente y con sustento —para ayudar al lector a que en sus obligaciones de ciudadano actúe en consonancia con lo que más nos convenga como sociedad— y, 2) divulgación publicitaria de ofertas empresariales.
Lo primero —la información de calidad— la hemos podido generar: allá tú, lector(a) eres nuestro termómetro. Nuestro volumen de impresión depende de lo segundo y el éxito de quienes usan nuestro impreso como vehículo para la divulgación de sus productos o servicios depende de la capacidad de nuestra impresión y distribución. Es un asunto "circular".
La tecnología ha facilitado felizmente la producción de la información y la generación del papel impreso. Pero ese aumento de tecnología ha venido acompañado de un aumento de la población y de las viviendas a las cuales deberíamos llegar con un ejemplar. Antaño, la cuestión era "al revés": la producción del ejemplar en todos sus aspectos era obra de grandes amantes del periodismo; la impresión tenía sus dificultades, finalmente salvables y, lo más feliz, ¡el número de viviendas al cual había que llegar era mucho más pequeño!
Se acabaron esos tiempos en que un impreso podría llegar a todas las casas de Mérida, produciendo, así, cierto grado homogéneo de nivel informativo. Hoy el mundo es asunto de miles de millones. ¿Internet? Cierto: disponible cada día para más personas pero, ¿existe algún control de calidad colectivo con respecto a lo que en la red se ofrece?
Sabemos que hoy 60% o más (?) de las casas de Mérida cuentan con la posibilidad de conectarse a Internet. Una vez conectados, los usuarios verán lo que ellos deseen en ese momento. Lo más que podemos hacer es invitarlos, a todos, a hacer la página a7.com.mx su punto de partida para conocer detalles que podrían hacer la diferencia en tu percepción regional. Si tienes un teléfono inteligente, visita nuestra página: te va a gustar. También te ofrecemos alimentación vía RSS.
¡Gracias por tu compañía durante estos 3 años! Te esperamos para las décadas que queremos serte útil.
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